UN NUEVO PROTAGONISMO
CALIFICACION: 2´5/5
Estados Unidos, 2013.- 130 minutos.- Director: Gus Van Sant.- Intérpretes: Matt Damon, Frances McDormand, John Krasinski, Rosemarie DeWitt, Hal Holbrook, Lucas Black.- – Pertenece a esa parte cada vez más minoritaria de la producción hollywodiense que intenta interesarse más por las personas que por los efectos especiales y que busca medir la temperatura moral de su tiempo dándonos a conocer cómo viven, piensan y sienten los millones de seres anónimos que pueblan el país más poderoso del mundo.
Si en décadas pasadas el cine de Hollywood nos ilustraba continuamente sobre dónde y cómo vivían los estadounidenses ahora hay que rebuscar mucho para encontrar cintas con inquietudes realistas, cotidianas y/o costumbristas. El público parece preferir la evasión lúdica que la reflexión sobre nuestro momento histórico. Sólo porque el film se decanta por lo segundo en un ambiente industrial y popular adverso, ya merece nuestro aplauso.
Steve Butler, un ejecutivo de una gran empresa, llega a un pueblo con una compañera de trabajo, para comprar los derechos de perforación a los propietarios de las tierras, casi todos ganaderos. En esa población, asolada por la crisis económica de los últimos años, Steve intentará convencer a la gente de los beneficios de perforar sus tierras, pero también tendrá ocasión de reconsiderar lo que ha sido su vida hasta ese momento.
Lo más destacado del film son, sin duda, los diálogos que están bastante por encima de unos personajes no del todo bien definidos y que presentan algunas actitudes y reacciones poco creíbles o directamente peliculeras, en el mal sentido de la palabra.
Van Sant opta por una dirección invisible muy de agradecer en un film como éste que insiste en unas de las tendencias argumentales más renovadoras e interesantes de la última década. La focalización en un protagonista que en tiempos pretéritos sería el antagonista del héroe, entroncando con el Aaron Eckart de Gracias por fumar, el George Clooney de Up in the air o la Jennifer Aniston de The good girl. Personajes con actitudes morales más que discutibles y trabajos que aún lo son más. Pero son el tipo de personas y profesiones que son preponderantes en el mundo actual y, por tanto, uno de los mayores aciertos de Hollywood es darles la voz cantante en sus films. Así la industria demuestra su perspicacia, su voluntad de verismo y su deseo de hacer una crítica indirecta al cochambroso mundo moral que nos rodea.