CAGADA TRAS CAGADA HACIA EL DESASTRE FINAL.
CALIFICACION: 3,5/5
Estados Unidos, 2009.- 90 minutos.- Director: Brian Koppelman, David Levien.- Intérpretes: Michael Douglas, Susan Sarandon, Danny DeVito, Mary-Louise Parker, Jesse Eisenberg, Jenna Fischer, Anastasia Griffith, Imogen Poots.- TRAGICOMEDIA.- La cartelera veraniega invita a recuperar películas que se nos escaparon a lo largo del curso por motivos diversos. El segundo film como directores de Koppelman y Levien tras la interesante Ajuste de cuentas (2001) confirma dos cosas: Que sus trabajos son muy interesantes y que no se van a comer nada en el Hollywood actual si siguen por ese camino. El via crucis vivido por este film así lo confirma. Estrenada en su país en 2009, llegó a España a finales de 2013 y en mi ciudad se estrenó ya en el trascurso de este 2014 en unas multisalas casi clandestinas en la carretera de la urbe a la playa. Duró una semana y no sé si, aparte de los compañeros críticos, alguien fue a verla.
Y la cinta es bastante mejor que la mayoría de lo que se estrena. Aparte de que no aburre en ningún momento y está bien producida, dirigida, montada e interpretada, el guión se atreve a explorar en los abismos de la condición humana, en la capacidad de algunos seres humanos de cagarla una y otra vez sin remisión empujados por un terrible miedo a la muerte e, incluso, a la vida.
El libreto siempre va un paso más allá de lo previsto y se pasa por los huevos toda la corrección política y el buenrollismo que tanto daño le ha hecho al cine y a nuestras vidas. Después de convivir unos años con estudiantes estadounidenses sé que si, por error, llegaran a ver este film ese sonido de reproche tan típico de la sociedad americana ante algo desagradable o, para ellos, inmoral se escucharía constantemente durante toda la proyección.
La crítica (moral, no cinematográfica, como muchas en la actualidad) del Hollywood Reporter explica el fracaso de la película: «Incluso con un profesional como Douglas dominando la película, es complicado interesarse por el personaje o una historia que toma giros decadentes a cada oportunidad” Impresionante. ¿Es que no se han dado cuenta que el film va precisamente sobre la decadencia del protagonista? Sería cómo decir que Uno de los nuestros es mala porque los protas son gangsters asesinos.
Otros la critican porque no es suficientemente trágica. No es la intención de los directores que quieren mostrar lo absurdo y grotesco de la existencia.
Hay que agradecer a una de las figuras más interesantes del Hollywood actual, Soderbergh, que haya producido esta película y que Douglas se haya atrevido a echar aún más por tierra su deteriorada imagen pública con este papel con apuntes autobiográficos.
El propietario de una cadena de coches con la líbido subida ve cómo su carrera y su vida personal se están arruinando debido a sus continuas indiscreciones, tanto en el plano profesional como personal.