DESESPERADO INTENTO DE SACARNOS LA PASTA…UNA VEZ MÁS
CALIFICACION: 1,5/5
Estados Unidos, 2012.- 103 minutos.- Director: Barry Sonnenfeld.- Intérpretes: Will Smith, Josh Brolin, Tommy Lee Jones, Alice Eve, Michael Stuhlbarg, Emma Thompson.- COMEDIA FANTASTICA.- No es dañina y se deja ver sin grandes problemas, especialmente en su parte central, pero esta tardía segunda secuela del megaéxito de 1997 está fuera de lugar y no aporta nada (ni siquiera auténtica diversión).
Cuando el MIB recibe la información de que el Agente K podría morir a manos de un alienígena, lo que cambiaría la historia para siempre, el Agente J es enviado a los los años 60 para evitarlo. Tercera entrega de la popular saga Men in Black.
Tras una resultona secuencia de apertura, previa a los créditos, pasamos a un anodino arranque que roza cotas ridículas en el discurso de Emma Thompson. La narración se entona algo cuando viajamos a los años sesenta, pero, a excepción del momentazo Andy Warhol, no se aprovechan las infinitas posibilidades del choque generacional ni la pintoresca estética y cosmovisión de aquellos años. El guión prefiere presentarnos de manera lamentable al personaje más interesante de la película, un extraterrestre capaz de percibir los infinitos posibles futuros. Pocas veces se ha desperdiciado tanto el enorme potencial de un personaje.
Lo peor está por llegar. El desenlace oscila entre el aburrimiento, la previsibilidad y el sentimentalismo más “made in Will Smith” y su vomitivo rollito all-american, un mundo donde todo es posible si te esfuerzas y si protestas contra las injusticias y los delitos jurídicos y morales del sistema eres un hippy maloliente y drogado. Véanse las “progresistas” Siete almas y En busca de la felicidad.